martes, 9 de julio de 2019

ANGEL DE ELIZABETH TAYLOR




Ángel

Elizabeth Taylor

Traducción de Jesús Zulaika

Editorial Anagrama 2012 (reeditado en 2013)

311 páginas

18,90 €

Elizabeth Taylor (1912-1975) fue una importante pero poco conocida escritora británica. Su nombre real era Dorothy Betty Coles pero como no le gustaba lo cambió por Elisabeth. En 1924 se casó con Kendall Taylor lo que le llevó a llamarse Elisabeth Taylor, coincidencia con la actriz y que le ocasionó más de un problema. Era una mujer discreta, muy cercana al partido liberal aunque refleja muy bien en sus obras la ideología de las clases más adineradas.

Escribió Ángel en 1957 y  en 1984 la crítica británica la eligió  como una de las trece mejores novelas inglesas después de la Segunda Guerra Mundial. Desgraciadamente sus obras han tardado en ser traducidas al castellano. Ángel fue la primera.

Ángel es una novela donde no pasan grandes cosas pero sí se lee con cierta desazón como consecuencia de la fuerza de su personaje principal.

Angélica Deverell es la hija de una tendera viuda de un barrio pobre, Volunteer Street,  de la localidad donde residen. Su padre falleció poco tiempo después de casarse así que Ángel se relaciona sólo con dos mujeres, su madre y su tía Lottie quien le paga los estudios en una escuela francesa.

Ángel sólo es feliz cuando escribe y, de hecho, las profesoras no dan crédito a sus redacciones: “Aunque desdeñaba tal prosa ornamental, tales crescendos y aliteraciones, antes de afirmar que se trataba de un texto vulgarmente sobrecargado confiaba en descubrir quién lo había escrito. (…) un texto digno de admiración en una chica de quince años” (pág.11). No le interesa nada la lectura de hecho dice que no lee nunca, “no lo encuentra interesante” (pág. 13).

Su tía Lottie trabaja como dama de compañía de una rica señora que vive en Paradise House y Ángel siempre fantasea con esta casa de tal manera que engaña deliberadamente a  dos niñas, Polly y Gwen,  mientras las acompaña al colegio.  Esto le lleva a una situación comprometida como consecuencia de la cual abandona la escuela y es, entonces, cuando decide escribir una novela.

Aquí es donde empieza realmente la historia de Ángel, una mujer sin amigas porque es vanidosa, impopular y reservada: “Nunca había tenido grandes amigas; la mayoría de la gente le parecía irreal. Su carácter reservado y su fama de vanidosa la hacían impopular” (pág. 22), pero ella desea desesperadamente hacerse un nombre dentro de la sociedad.

Consigue publicar novelas románticas bastante pésimas, grandilocuentes,  pero que le llevan a ganar mucho dinero, dejar el barrio que más odia, vivir en una mansión recargada y agobiante. Escribe noche y día sin descanso. Trata mal a su madre, a la que no le tiene ningún respeto, ni al servicio, ni a su representante, Theo,  que es el que consigue que se publiquen sus novelas y el único que realmente será su amigo y  que se preocupe por ella.

Todo cambiará cuando conozca a  Nora Howe-Nevinson y a su hermano Esmé, pintor sin éxito, un hombre inestable según su hermana, mujeriego y jugador empedernido que despilfarra la fortuna de la familia.  Ángel se enamora perdidamente de Esmé y Nora se enamora de Ángel y dedicará el resto de su vida a vivir con ella.

Ángel consigue casarse con Esmé pero su vida de casados no es precisamente días de vino y rosas y la Gran Guerra cambiará sus vidas ya que Esmé se alista en el ejército pese a la resistencia de Ángel de que no vaya. El resto de la novela se tiene que descubrir.

Ángel es una novela desgarradora pese a que parece que la narración transcurra sin sobresaltos. Esto es lo que la hace especial y maravillosa. Es una novela distinta a las que he leído anteriormente de Elizabeth Taylor, como Una vista del puerto, La señorita Dashwood, muy cercana a Jane Austen, y El juego del amor, aunque si algo las caracteriza es que son novelas de una gran calidad literaria.

Ángel es una novela muy recomendable y ha sido reeditada nuevamente en el año 2013,  tan recomendable como cualquiera de sus novelas.