sábado, 30 de agosto de 2014

LA SEÑORITA MAPP DE E.F.BENSON



La señorita Mapp
E.F. Benson
Traducción de José C. Vales
Editorial Impedimenta 2013
379 páginas
22,75 €

Edward Frederic Benson (1867-1940) era un reconocido escritor de cuentos de fantasmas aunque fue la saga de Mapp y Lucia la que le dio reconocimiento. Consta de seis novelas y varios relatos. La señorita Mapp (1922) es la segunda de la serie y en ella va incluido uno de los relatos, La vizcondesa del music hall (1929).

La narración transcurre en Tilling, pueblecito costero inventado por Benson y tan importante en la narración como los propios personajes.

Elizabeth Mapp es una de las damas más importantes de Tilling. Es una mujer avara, hipócrita, rencorosa y malvada pero elegante, encantadora y tremendamente coqueta.

Maneja a la sociedad de Tilling a su antojo y, a través de su cenador, no se le escapa ningún acontecimiento que suceda a su alrededor: “la señorita Mapp permanecía sentada, como una gran ave de presa, junto a la espléndida ventana de su cenador de piedra; el amplio arco que la conformaba le ofrecía un estratégico ángulo de visión que le resultaba extraordinariamente útil para sus propósitos” (pág. 9). Desde la ventana controla los movimientos de todos sus habitantes y someterá a todo su círculo social.

Controla al mayor Flint y el capitán Puffin ya que sus casas dan a ambos lados de su ventana. Están obsesionados con el golf y el whisky. Son grandes amigos que pasan sus noches discutiendo y bebiendo a partes iguales y la señorita Mapp les intentará separar, no en vano lleva mucho tiempo pretendiendo casarse con el mayor Flint.

Otro personaje entrañable es Diva Plaistow, que debe su nombre a Lady Godiva, más cotilla si cabe que Elizabeth Mapp. Entre ellas existe una tremenda rivalidad por ver quién sabe más de los acontecimientos que suceden en Tilling. En secreto se copian los vestidos y esto da lugar a situaciones realmente entretenidas en la lectura de la novela.

Las situaciones más divertidas se dan en las partidas de bridge, en casa de Susan Poppit, miembro de la Orden del Imperio Británico, la cual mantiene una relación nada discreta con el discreto señor Wyse, emparentado con la aristocracia italiana ya que su hermana está casada con un conde y a  la cual todo Tilling está deseando conocer. 

En La señorita Mapp todos los personajes son decimonónicos pero hay uno que es un soplo de aire fresco en la narración,  Irene Coles, sufragista, socialista y pintora postimpresionista que gustaba de pintar desnudo al tendero y a la cual odia profundamente la señorita Mapp. “Desprendía un espantoso tonillo humorístico, un indecente desprecio por la opinión pública o privada, y su talento innato para la imitación burlesca eran tan asombroso como su opinión sobre los alemanes” (pág. 39).

Entre los rumores de la visita del Príncipe de Gales, el duelo del mayor y el capitán, el golf, las partidas de bridge y el acopio de comida, La señorita Mapp representa una sátira de la Inglaterra rural de principios del siglo XX y narrada con mucho sentido del humor.

En la misma novela está el relato La vizcondesa del music hall. Una lectura de apenas veinte  páginas que podría ser uno de los capítulos de La señorita Mapp, en la que el autor nos obsequia con las mismas intrigas, malentendidos y humor que hemos encontrado en la novela.


La señorita Mapp es una lectura muy entretenida que nos hará adentrarnos en el universo Mapp y Lucia y para disfrutar durante el verano, olvidándonos de la tonta programación televisiva porque, para divertirnos con cotilleos, tenemos a los habitantes de Tilling. 

lunes, 25 de agosto de 2014

LA FUERZA DE LOS FUERTES DE JACK LONDON



La fuerza de los fuertes
Jack London
Ilustraciones de Mar del Valle
Ediciones Traspiés, 2014
62 pp
15 euros

No sé exactamente cuántos libros habré leído de Jack London desde mi infancia, pero no me equivoco si digo que pueden ser una treintena entre novelas y libros de relatos. Es un autor al que, a pesar de ser considerado ahora como de juventud, regreso con cierta asiduidad. No en vano puedo haber leído su  Martin Eden una decena de veces, a los que han seguido otros tantos como Colmillo Blanco, La llamada de la selva, Asesinatos SL, Talón de hierro, John Barleycorn, las memorias alcohólicas, etc…

En el caso que nos ocupa, La fuerza de los fuertes, libro que ahora ha aparecido en la editorial Traspiés preciosamente ilustrado por Mar del Valle, nos encontramos ante un relato breve que contiene todo el universo London. Una parte de biologismo, también algo de filosofía spenceriana, la lucha por la vida y una prosa simple pero que se desliza contándonos la historia con facilidad y maestría.

Recuerdo, y cito de memoria, que en Martin Eden el protagonista achacaba a un profesor universitario su carencia de biología. Bien, en este La fuerza de los fuertes hay mucha biología, mucho darwinismo social.

La trama es bien sencilla. En una tribu un viejo cuenta a sus nietos la historia de la misma, esta explicación supone una parábola de la realidad pues al mismo tiempo nos está contando el origen de las sociedades, de la economía, de la pirámide social, del dinero y del advenimiento del capitalismo con sus desigualdades. Uno tras otro los acontecimientos se suceden de forma que casi nos parecería que estamos reviviendo las etapas en la construcción de cualquier sociedad moderna, la diferencia es que la tribu parece vivir en una especie de época paleolítica. Todo empieza con la necesidad de buscar un jefe - y digo que empieza, pero en realidad, debería decir que empieza a torcerse - dado que llegan a la conclusión de que es mejor tener a alguien que los dirija. Eso lleva a la creación de una nobleza, al reparto de las tierras que antes habían sido comunales, la aparición del dinero, la creación de un ejército, la organización de la familia, la división del trabajo, la creación de propietarios y jornaleros y la llegada de un cierto capitalismo inicial que podemos fácilmente trasladar a la actualidad cubriendo las líneas de puntos que nos marca el autor.

De una forma amena y a través de personajes con nombres típicamente tribales, London nos da una lección de economía en un relato que bien podría servir para ilustrar muchas lecciones. 

Como todo lo de London absolutamente recomendable y, con el añadido, de las estupendas ilustraciones a dos tintas.


Añadiría que el hecho de haber sido escrito hace cien años ni le resta interés, más bien al contrario, en estos tiempos nuestros tan convulsos, ni su manera de narrar y su lenguaje nos alejan de su lectura. Una buena elección para llenar una tarde aburrida de domingo.

martes, 12 de agosto de 2014

LA IMPECABLE ACTUACIÓN DE LA POESÍA PARA REDUCIR A UN HOMBRE DE GSÚS BONILLA






La impecable actuación de la poesía para reducir a un hombre
Gsús Bonilla
Ed. Umbrales, 2014
45 pp
5 euros

Gsús Bonilla es conocido por su faceta ilustradora en numerosas editoriales (Baile del sol, Amargord, etc) y también por su labor poética. En este pequeño libro de largo título, La impecable actuación de la poesía para reducir a un hombre, parece unir ambas facetas.  Quizá porque el planteamiento del libro gira a caballo entre ambas disciplinas: la imagen y la palabra. Simplemente porque  se complementan. Así la imagen es pieza fundamental en ocasiones y, en otras, es la palabra la que da el contrapunto. Podríamos decir que no sobreviviría la una sin la otra.

En primer lugar parece que el autor intenta jugar con el lector pues uno encuentra más palabras en el título que en muchas de las páginas que contiene el libro. Este juego quizá sea el principio para adentrarnos en las imágenes en blanco y negro. Imágenes turbias, desleídas en ocasiones, imágenes que nos obligan a hacer a veces un ejercicio figurativo. Y la palabra como contrapunto final. Imágenes y palabras que utilizan juegos, que también se sirven de artificios retóricos y estilísticos. Veo metáforas, comparaciones, paradojas, hipérboles… Es fácil aplicar el mismo criterio a la imagen. Se nota que el autor se siente cómodo en ambos mundos y los utiliza para complementarlos.

No sabría decir si lo que tenemos delante es algo así como  poesía visual, probablemente porque cuando nos encontramos entre géneros mixtos toda definición se hace más complicada.

Son recurrentes las temáticas sociales, la crítica, una relación muy cercana con el entorno actual. Gsús Bonilla se muestra como un autor áspero con el tiempo que le ha tocado vivir y esa función la expresa en sus imágenes y textos. Imágenes y textos que del mismo modo que nos obligan a pensar, a reflexionar, también nos conducen a la indignación, al hastío.  El dinero, el capitalismo como sistema, el mercantilismo, la insolidaridad, la necesidad, la falta de futuro, el miedo, la hipocresía, los falsos liderazgos, la baja calidad de la democracia, los recortes sociales, son algunos de los temas de los que habla el autor. Temas todos ellos de primerísima actualidad.


La impecable actuación de la poesía para reducir a un hombre es un libro para leer, ver, releer y  volver a ver. Un libro que no se agota en la lectura ni en la contemplación. Un libro que debe perpetuarse en nuestro pensamiento, en nuestras reflexiones, un libro dispuesto a abrir camino y mentes. Un libro, en definitiva, de los que marcan sendero, de los que abren caminos. Un libro que huele a libertad de verdad. Un libro que no podemos perder a pesar de su brevedad o por ella.